Mi chiquitita ya va cumpliendo añitos. Este verano ya cumple 6 añitos, o bueno, 6 añazos, porque en años perrunos ya es mayor que yo. Como leí hace poco, es increíble el amor que le dedicas durante una década a estos peludines, para que luego se vayan tan rápido de tu lado.
Yo bueno, creo que sí hay algo después de esta vida, y creo que el espíritu sobrevive y que como no tenemos principio ni final siempre estamos juntos y esta es sólo una separación breve, un "hasta luego". Pero aún así, temo el día que llegue. Como lo temería con cualquier persona de mi familia o amigos. Para mí mi chiquitita es una más de mi familia.
Por eso, entre esta agitada vida que muchas veces no nos deja respirar, aprovecho las noches cuando se acurruca junto a mí ese ratito antes de irme a dormir; Disfruto cuando por las mañanas me despierto y está a mis pies en la cama, y en cuanto me ve moverme viene a darme los buenos días. Me gusta verla pasear por el campo, disfrutando, aunque ya no tan impetuosamente como antes, pues ya sus años mozos van pasando y se lo notamos todos.
Tengo la gran suerte de que mi chiquitita jugará un papel importante en mi boda que ya poco a poco se aproxima. Tengo la gran suerte de que saldrá en las fotos conmigo, con nosotros, con toda nuestra familia, que participará en ese gran día, como alguien especial que es.
Supongo que sólo me podrán entender las personas que como yo aman los animales. Para otros sólo seré una loca, pero más locos están ellos y no se dan cuenta. Yo soy así, y me encanta mi chiquitita.
Gracias por compartir la vida conmigo.
