A veces la vida te regala tardes maravillosas como la que pasé con esta preciosa pareja, que fue una delicia en todos los sentidos; Ellos son increíbles, la luz era perfecta, y estábamos en un campo con almendros en flor! ¿Qué más podría pedir para una sesión? ;)
Si quereis ver una pequeña muestra de esta preciosa sesión, seguid leyendo!