21 noviembre 2011

Un día cualquiera

.
Estas cosas son las que hacen la vida divertida; Eso sí, te ries cuando ya han sucedido... porque lo que es en el momento, uff, justo entonces no le ves la gracia. Y es que los días que se levantan torcidos, ya puedes intentar apuntalarlos, que pocas veces conseguirás salir del apuro.

Hoy estuve en la capital; Entre otras cosas, mis dos grandes objetivos eran hablar con el dueño de un lugar en el que tenía pensado ir a hacer fotos este próximo fín de semana, y por otro lado comprar cierta revista de Novias.

En primer lugar, el paseo hasta el lugar de las fotos (que está en una población cercana) fue en vano, ya que me dieron la gran noticia de que todos los días están abiertos pero justamente este sabado cierran. Toma casualidad! "Bien, no pasa nada"- me decía a mí misma- "vamos a coger la revista y ya haremos las fotos en otro sitio".

Así que me volví de nuevo a la capital, y como no tenía suelto para pagar la zona azul, tuve que entrar a un supermercado y cogí lo primero que pillé para que me dieran algo de cambio. Eso resultaron ser unos deliciosos Brownies -sí, estoy a dieta, y qué-. Pero resultó que al ir a la máquina de la Zona azul, pude constatar que el cambio que me habían dado era demasiado poco para sacar lo que necesitaba. Así que corrí al quiosco más cercano y me compré unos Bocabits. Por fín pude sacar el ticket de la zona azul (solo me faltaba que en ese espacio de tiempo me hubieran puesto una multa, jejej).

Toda contenta pensaba que podría encontrar algun sitio donde tuvieran la revista que buscaba. Pero ayyy inocente de mí! Fue misión imposible. Nada, rien, nothing... ni una sola en todos los quioscos del centro.

Asi que pues eso, al final me volví a casa con unos brownies, unos bocabits, sin la revista y sin lugar para las fotos. Estas cosas... sólo me pasan a mí.